miércoles, 2 de marzo de 2011

Naciones Unidas tiene una estrategia: invertir 2% del PIB global en la transición hacia una economía verde

El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente -Unep son sus siglas en inglés; Pnuma, sus siglas en español- tiene una estrategia: invertir 2% del Producto Interno Bruto global, 1,3 trillones de dólares al año, en diez sectores clave para iniciar una transición hacia una economía verde, eficiente en el manejo de los recursos, baja en la generación de carbón. Algunos de esos sectores son la eficiencia energética, el reciclaje de desechos y las energías renovables.

La cifra, incluida en el informe, titulado Towards a Green Economy: Pathways to Sustainable Development and Poverty Eradication, parece escandalosa, pero el Pnuma sostiene que en la actualidad, el mundo gasta precisamente entre uno y 2% del PIB mundial en una serie de subvenciones que a menudo perpetúan el uso insostenible de los recursos en áreas tales como los combustibles fósiles, la agricultura, incluidos los subsidios a los plaguicidas, el agua y la pesca.


Los diez sectores señalados en el informe como la clave para la ecologización de la economía mundial son: la agricultura, la construcción, el suministro de energía, la pesca, la silvicultura, la eficiencia energética, el turismo, el transporte, la gestión de residuos y el agua. Del 2% ciento del PIB propuesto en el informe, las sumas invertidas por sector en los niveles actuales del PIB serían, por ejemplo, más de 360 mil millones para hacer más ecológicos los suministros de energía.


Sospecho que esta estrategia será asumida por los gobiernos del mundo según el costo político que les suponga. No es nada popular vender a la población que la transición hacia una economía sostenible implica, como explica el informe de la Pnuma, una perdida de empleos en algunos sectores como la pesca.


Otra cortapisa es que, según sugiere el informe, la mayor parte de ese 2% tendrá que provenir del capital privado. Hay que contar con el factor humano, es decir, con que la ética de negocios de los capitales privados estén dispuestos a invertir en los sectores claves aunque las ganancias no sean similares a las que obtienen actualmente en los sectores de consumo convencionales.


El Pnuma define una economía verde como “una que se traduce en la mejora del bienestar humano y la equidad social, reduciendo significativamente los riesgos ambientales y la escasez ecológica”.


21/02/2011
Vía www.ecologiablog.com