Las tortugas (Testudines) son reptiles caracterizados por tener un tronco ancho y corto, protegido por un caparazón formado, generalmente, por placas óseas revestidas de placas córneas, y a veces sólo por placas córneas. Del caparazón salen, por delante, la cabeza y las patas anteriores, y por detrás, las patas posteriores y la cola.
Las hay de diversos medios: terrestres, marinas, de agua dulce, y es uno de los reptiles más antiguos que hay sobre el planeta.
Algunos científicos especulan que la primera tortuga apareció hace casi 215 millones de años.
Como ocurre con cualquier otro organismo del reino animal, cada tipo de tortuga vive hasta una edad diferente.
Los tiempos de vida de las tortugas silvestres no son los mismos que los de aquellas que viven en cautiverio.
Una tortuga que ha sido cuidada como mascota puede tener una vida más longeva que otras enfrentadas a la hostilidad del medioambiente.
El promedio de vida de una tortuga es de 50 a 80 años, no poco considerando la propia vida humana.
Algunos tipos específicos pueden llegar a los 100 años, pero esto se considera un hecho extraordinario.
Existen incluso historias de tortugas longevas que han alcanzaron los 300 años, algo totalmente fortuito. En cualquier caso tienen suficiente tiempo para disfrutar de la vida.
¿Cómo saber la edad de una tortuga?
A diferencia de los árboles, cuyos anillos indican indefectiblemente cuántos años han vivido, la edad de las tortugas no puede ser determinada con tanta exactitud.
Las líneas que recubren su carapacho son más ambiguas y no ofrecen precisión en la imagen.
Sin embargo, sí puede estimarse de manera aproximada cuantos años debe tener el individuo que observemos.
Por supuesto, esto sólo es posible para aquellas tortugas que posean cubierta de tipo duro, pues son las que tienen escamas que arrojan información relativa sobre su edad.
Por otra parte, mientras más vieja sea una tortuga, perderá más porciones de su escudo, lo que puede también indicarnos si estamos frente a un individuo joven o a uno en las postrimerías de su vida.
Las tortugas son criaturas asombrosas. Estas ofrecen paz y armonía a quienes las adoptan, además de que son mascotas perfectas para los más pequeños.
@HoyVerde
Fuente: ojocientifico.com
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