Gary Hack, de la Universidad de Maryland, y Andrew Gallup, de la Universidad de Princeton, indican que el cerebro es muy sensible a los cambios de temperatura y, por lo tanto, debe ser protegido contra el sobrecalentamiento, informa Reuters Health.
"Los cerebros, como las computadoras, funcionan mejor cuando están frescas", indicó Gary Hack.
El estudio publicado en la revista "Medical Hypotheses" explica que durante el bostezo las paredes de los senos maxilares (localizados en las mejillas a cada lado de la nariz) se mueven y ayudan a regular la temperatura del cerebro.
Los investigadores dijeron que su teoría de que los bostezos ayudan a enfriar al cerebro tiene implicaciones médicas. Por ejemplo, los epilépticos bostezan mucho antes de las convulsiones, al igual que las personas con migraña antes del dolor de cabeza.
Gary Hack añadió que sabemos muy poco de las funciones que poseen los senos nasales. Hasta ahora algunos científicos pensaban que no tienen ninguna función en nuestro cuerpo.
Los médicos creen que ahora pueden utilizar el bostezo excesivo como un método para curar a los pacientes que sufren de una irregularidad de la temperatura.
Con información de: Agencias | Hispan Tv
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