Por lo general estos hombres suben de peso, padecen náuseas y trastornos para dormir. Otros síntomas son el estreñimiento, los dolores de muela, los problemas digestivos, endurecimiento de los pezones, diarreas y hasta los llamados “antojos”. Y como si todo eso no bastara, a algunos hasta les crece el vientre similar a una mujer sietemesina.
El origen de este síndrome no parece estar muy claro entre los científicos. Las opiniones se dividen entre causas psicosomáticas y causas biológicas. Algunos atribuyen estos síntomas a celos del hombre ante la capacidad femenina de dar a luz. Otros consideran que es una respuesta al nuevo rol social, una forma de expresar sus sentimientos sobre las expectativas sociales y responsabilidades de la paternidad.
La escuela biológica señala que en realidad en el cuerpo masculino se producen verdaderos cambios fisiológicos. Los estudios han sugerido alteraciones hormonales que se traducen en un incremento del estradiol, una hormona femenina, y menores niveles de testosterona.
Sin embargo, otras posiciones defienden la idea de que tales cambios físicos se producen como consecuencia de factores emocionales, del mismo modo que tenemos dolores de cabeza frente a un examen o malestar de estómago frente a personas que nos atraen.
Este inusitado cuadro sintomático desaparece después de que el bebé nace. En algunos casos contados se refiere el desarrollo de trastornos psicótico posteriores. Los médicos no pueden aún explicar por qué el fenómeno ocurre en algunos hombres y en otros no.
Con información de: Agencias |OjoCurioso
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