Esta hierba es considerada un antibiótico natural: mata los virus y bacterias. Es rica en vitaminas C, E, K y Omega 3, y en minerales como el magnesio, manganeso, cobre, potasio y zinc. Pero su beneficio más importante es, indiscutiblemente, la cantidad de antioxidantes que posee. De hecho, según The Institute of Food Technologists, en el orégano se concentran hasta 20 veces más poder antioxidante que en otras hierbas; tiene incluso 42 veces más antioxidantes que las manzanas. Esto es sumamente beneficioso para nuestro cuerpo, ya que los antioxidantes fortalecen nuestro sistema inmunológico y contrarrestan los efectos negativos de los radicales libres, los cuales nos hacen envejecer y dañan nuestra piel.
Por otra parte, el orégano está indicado para tratar la osteoporosis y la arteriosclerosis, pues posee una sustancia llamada beta-cariofilina que ayuda a evitar la inflamación. También es favorable para el sistema digestivo, no sólo porque incrementa nuestra salivación, lo que permite ablandar los alimentos que comemos, sino porque estimula el flujo de la bilis hacia los órganos digestivos. Esta sustancia contribuye a disolver las grasas de los alimentos en el intestino, y neutraliza el exceso de ácido del estomago.
Las hojas del orégano se pueden consumir frescas o secas, pero también podemos utilizar su aceite. En esta presentación, esta hierba es capaz de curar infecciones bacterianas de la piel, eliminar los parásitos intestinales, ayudar a mejorar la colitis, y regenerar las células del hígado. También se emplea para tratar los problemas de encías y mal aliento. Este aceite es milagroso porque contiene dos sustancias poderosas: el timol y el carvacrol. La primera es un fungicida natural con propiedades antisépticas que sirve, entre otras cosas, para eliminar hongos. La segunda es un compuesto químico con propiedades analgésicas, antibacterianas, antimicóticas y antioxidantes.
Muchos prefieren ingerir esta hierba en infusiones. Y es que, además de diuréticas, este tipo de bebidas son fabulosas para combatir y prevenir los dolores menstruales, y combatir el estreñimiento. También son ideales para aliviar la tos crónica, y eliminar los terribles dolores de garganta. De igual forma, permiten regular el sistema nervioso y reducir los niveles de estrés; y son efectivas para evitar el insomnio en las personas. Pero la versatilidad del orégano es todavía mayor, hay quienes incluso aspiran el vapor de esta hierba para aliviar refriados, y mejorar los síntomas del asma y la bronquitis. Sin embargo, el consumo de esta planta en cualquier presentación, está contraindicada en las mujeres embarazas, ya que es un estimulante de las paredes uterinas.
El orégano es fácil de adquirir, no es costoso, y además lo podemos cultivar sin muchas complicaciones en nuestro hogar, de allí que sea una de las hierbas más populares que existen. Sus propiedades curativas son asombrosas, mucho más que su intenso aroma, por eso no puede faltar en nuestra casa. No te limites a esparcirlo únicamente sobre un pedazo de pizza, o sobre un pan con queso y tomate; prueba otras combinaciones y sorprende tu paladar, mientras beneficias tu organismo.
Por Erika De Paz
IG @ERIKADPS